Despierta tu parte creadora

Te invito a un espacio donde jugar con la pintura es la puerta de entrada. Pintar es una forma de disfrutar, expresarte y sentir con libertad. La pintura abre un camino para conectar con lo que llevás dentro y dar forma a tu manera única de crear, de habitar tu creatividad en estado puro. El acto de pintar se convierte en un diálogo espontáneo con tu parte creadora y tus emociones; es una forma de dejar huella de tu potencial creativo.

Cada sesión es un momento para dejar que tus colores hablen por ti, que tus manos jueguen y que tu cuerpo se exprese. Vamos creando una pintura, paso a paso, que guarda lo que eres y lo que sientes. Tu creatividad se vuelve una huella viva de tu autenticidad.

Formato sugerido:
Proceso individual o grupal de 4 a 6 sesiones puede variar.

Te propongo:

• Acompañarte en un proceso personal, desde el juego y la expresión.

• Jugar con los colores para escuchar lo que el cuerpo y las emociones tienen para decir.

• Dejar que la pintura registre tu espontaneidad y se transforme. en huella creativa.

Un espacio grupal para abrir una exploración desde el lenguaje simbólico, los arquetipos y las imágenes interiores. A través del arte y el cuerpo, iremos reconociendo lo inconsciente que nos habita: aquello que busca ser escuchado, visto o representado. Cada persona puede darle su propio significado, su voz, forma y materia a lo que surge. Es un espacio libre de interpretaciones externas.

Te propongo:

• Contactar con símbolos, imágenes internas y sensaciones que surgen espontáneamente.

• Dar expresión plástica a lo que habita en lo profundo.

• Acompañar los procesos individuales dentro de una contención grupal.

Formato sugerido:
Encuentro único o ciclo de 4 sesiones.
Presencial.

Dirigido a personas en búsqueda de autoconocimiento desde una mirada simbólica y vivencial.

Un recorrido por las etapas vitales para dar voz y cuerpo a todo lo que fuiste y eres.

Este taller propone un viaje simbólico desde lo vivido hacia lo que hoy somos. Transitaremos por distintas etapas de nuestra historia vital, reconociendo emociones, imágenes y experiencias que han dejado huella. A través del arte y el cuerpo, iremos configurando un mapa simbólico que nos permita mirar el presente desde una comprensión más amplia y amorosa.

Para sostener este viaje interior, nos acompañará el tambor chamánico. Su sonido marcará los ritmos del recorrido, guiando los momentos de entrada y salida a cada escena simbólica. El tambor será el pulso que acompaña, sostiene y enmarca las imágenes internas que se despliegan, dándole cuerpo y dirección al tránsito entre memorias y emociones.

Formato sugerido:
Ciclo de 4 sesiones (una por etapa o fragmento vital).
Presencial.

Dirigido a personas que quieran dar un sentido nuevo a su biografía, integrar etapas y resignificar su presente.

Te propongo:

• Revisitar la propia biografía y poder recrearla desde una perspectiva creativa y terapéutica.

• Honrar y validar las experiencias y huellas del pasado como consecuencia del presente.

• Poder revisitar nuestra historia de vida, abrazando a cada une de tus yoes, en sus formas, tiempos y memorias.

Astro experiencia:

los planetas en mi

Cuando el cuerpo recuerda lo que el cielo susurra

Los planetas también viven en nosotres: son energías en movimiento, pulsos internos que nos habitan y atraviesan.
La astrología, como lenguaje ancestral, ha acompañado a la humanidad desde siempre; los planetas han sido faros que nos orientan y símbolos vivos que resuenan en lo profundo. Cada uno representa una fuerza, una energía, un arquetipo que pulsa dentro de nosotres.

Al reconocerlos en nuestro mundo interno, también reconocemos el tejido mayor al que pertenecemos. Ese cielo que nos envuelve no está afuera: es parte de lo que somos.
La carta natal es el mapa de ese instante irrepetible en que nacimos, cuando el cielo tomó una forma única. Es la imagen simbólica de cómo esas energías universales se anclaron en nuestro ser. Conocerla es también una forma de conocernos, de ponerle cuerpo y palabra a lo que ya nos habita.

En este taller te invito a explorar los arquetipos planetarios desde una experiencia viva: bajarlos al cuerpo, moverlos, nombrarlos, dibujarlos; darles forma a través del gesto, la palabra y el arte.
Sentir cómo cada planeta se expresa en tu vida, cómo dialoga en lo emocional, en lo vincular, en tu forma de estar en el mundo.

Dirigido a personas interesadas en astrología, autoconocimiento y vivencias simbólicas. No se requiere conocimiento previo

Formato sugerido:
Ciclo de 8 sesiones (una por planeta). También se puede vivir como experiencia puntual.
Presencial.

Te propongo:

• Aprender astrología desde una vivencia simbólica y sentida.

• Autoconocerte a través de los arquetipos planetarios.

• Explorar las energías de los planetas desde el cuerpo,

  la emoción y el arte.

• Habitar tu carta natal como un espejo íntimo y transformador.

• Integrar lo vivido mediante la escritura, el movimiento y

  la presencia.

Hay experiencias que nos habitan en forma de tensión, incomodidad o desorden interno. A veces no tienen palabras, pero sí colores, formas, escenas internas, a las que llegamos a través de metáforas.

En este taller grupal proponemos acercarnos a esas sensaciones y dejarlas salir, atravesarlas desde la calma de pintar, de dar forma simple a lo que ahora nos está tocando.

Usamos la pintura para sentir, para atravesar, y también para sostener lo que inquieta. Contactamos con eso que está ahí y le damos salida de un modo amable y presente. Pintamos lo que pesa. Y mientras lo hacemos, algo adentro se acomoda, se abre, encuentra descanso.

LOM es una práctica que trabaja con lo emocional desde el lenguaje visual, a través del cuerpo, la percepción y el acto de crear. Al ofrecer nuevas formas a escenas internas cargadas de tensión, también damos lugar a otras maneras de responder.
Cuando cambia la imagen, el sistema nervioso encuentra otra forma de procesar, otra posibilidad de estar.

Y todo eso sucede mientras pintamos, acompañades por otres que también están ahí, en ese acto de confiar.

Te propongo:

• Habitar la pintura como un espacio de reparación: donde el color acompaña, el trazo ordena y lo compartido da sostén.

• Descubrir que cuando cambia la imagen, también puede cambiar cómo la sentimos.

• Darle un nuevo registro a lo que pesa.

• Atravesar lo incómodo a través de la suavidad.
  

• Acompañar los procesos individuales dentro de una contención grupal.

Formato sugerido:
Encuentro único o ciclo de sesiones.
Presencial.

Dirigido a personas que deseen resignificar experiencias difíciles y abrir nuevas formas de mirarlas. Apto también como acompañamiento complementario a terapia.

El olor de los colores, pintar con mis manos y todos los materiales y técnicas que me hiciste utilizar me pusieron en contacto con mi lado más juguetón y creativo. Me ayudó el espacio acogedor de tu estudio, la música, el sentirme no juzgado por ti sobre mi trabajo y el hecho de poder expresarme como quería.

Cosmin

★★★★★